Un puesto para Javier Solana... por favor.

La llegada de la baronesa Ashton de Upholland a la posición de Alta Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad (uff) ha causado graves daños colaterales en la diplomagia española. No sólo Moratinos ha visto reducido su protagonismo en la descafeinada presidencia española de la Unión Europea que comienza mañana, sino que nuestro incombustible Javier Solana, tantos años cabeza visible de la diplomacia europea en uno u otro cargo, desde su Secretaría General de la OTAN a la posición de Mister Pesc, se ha quedado de repente compuesto y sin cargo.

Según fuentes del entorno de Javier Solana consultadas por El Confidencial Digital, el hasta ahora alto cargo de la UE “ha aterrizado muy mal” a su salida de las instituciones europeas. El fichaje por la escuela de negocios ESADE provoca especial escepticismo [...] El fichaje, finalmente frustrado, de Solana por George Soros, [...] le hubiera sido económicamente muy rentable al político español, igual que su contratación para Acciona por parte de los Entrecanales. El precedente de otro gran nombre de la diplomacia española, Jorge Dezcallar, cuando fichó como asesor de Repsol, estableció un precedente: los sueldos de estas compañías multinacionales son enormemente superiores a lo que se cobra en la política.
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El "carguito" como "responsable de la Política de Seguridad" ofrecido por Rodriguez Zapatero a tan histórico predecesor en lejanos gobiernos socialistas suena un poco a títulín administrativo para tenerlo contento. Recomiendo vívamente al interesado que vaya a disertar sobre sus amplios conocimientos y anécdotas vividas en las relaciones internacionales a cuanto Palacio y/o Televisión encuentre a mano, a ver si hay suerte. De lo contrario le veo interesándose por puestos vacantes de fantasma en castillos o iglesias medievales.